1. La tilapia. Este pez cuenta con ácidos grasos Omega-3, lo que la hace muy saludable para el corazón, además de que posee un alto contenido de proteínas y vitaminas B, D y E.
2. La avena. Fuente inagotable de nutrientes de los alimentos reconfortantes. Intente tostar avena para cubrir el yogur, las ensaladas o agregar a una mezcla de frutos secos si no le gustan los cocidos.
3. Las legumbres. Los frijoles secos y las lentejas, como el garbanzo, el pinto, el frijol rojo o los frijoles negros, son ricos en fibra, vitaminas B, minerales y otras cosas buenas.
4. Una copa de vino tinto. Hasta dos para hombres y una para mujeres, puede ayudar a mejorar los niveles de colesterol bueno (HDL) .
5. Vegetales verdes. Las espinacas, la col rizada y las acelgas son ricas en vitaminas y minerales. Puedes comerlas en sándwiches y ensaladas en lugar de la lechuga. El brócoli y los espárragos están llenos de poderosos nutrientes como las vitaminas C y E, potasio, ácido fólico, calcio y fibra.
6. Manzanas rojas. Están relacionados con un menor riesgo de enfermedad cardíaca. Esto se debe a que contienen muchos compuestos como un fitoquímico llamado quercetina que actúa como un agente antiinflamatorio natural, previniendo los coágulos de sangre.
7. Aceite de oliva. Reduce el riesgo cardiovascular, mejora el colesterol LDL y aumentar los niveles de colesterol HDL. Es un componente esencial de una dieta mediterránea. Elígelo para cocinar o hacer una salsa.
8. Aguacates. Ricos en ácidos grasos monoinsaturados al igual que el aceite de oliva, además de que están cargados de vitaminas y fitoquímicos que funcionan como antioxidantes para proteger su corazón.
9. El chocolate negro. Cuanto mayor sea el porcentaje de cacao, mejor. Además poseen fibra y proteína. Si eres fanático del chocolate con leche, comience con uno que tenga mínimo 70% de cacao.
10. Almendras. Contienen vitamina E y otras sustancias que ayudan a mantener los niveles de colesterol bajo control. Son una buena fuente de proteína y fibra.