Y es que ante la lluvia de desinformación que hay al respecto, es importante tener claro lo que sí podemos sentir luego de recibir la vacuna, y no tener miedo de inmunizarnos por cosas sin comprobación científica que llegan por las redes sociales o el WhatsApp.
Lo primero que debemos saber es que las vacunas son diferentes entre ellas y que, al igual que nosotros, las reacciones pueden ser mayores o ninguna. Lo segundo, que estos efectos secundarios no son malos o riesgosos para nuestra salud.
Porque, como indica el Dr. H. Dirk Sostman, presidente del Instituto Académico del Hospital Houston Methodist, estos efectos son una indicación de que la vacuna está haciendo su trabajo en nuestro organismo, es decir, nos está ayudando a que el cuerpo desarrolle inmunidad. Así que, ¡adelante y a vacunarse!
EFECTOS SECUNDARIOS MÁS COMUNES
Dolor, enrojecimiento e hinchazón en el lugar de la inyección.
Fatiga.
Dolor de cabeza.
Dolor muscular y articular.
Fiebre leve y escalofríos.
Náuseas / vómitos.
Ganglios linfáticos inflamados.
Ahora bien, si llegarás a sentirte muy incómodo, puedes tomar un analgésico como Tylenol, y verás que a medida que pasen las horas, te sentirás mejor.
Mi papá, que se vacunó el fin de semana, lo único que sintió fue dolor en el brazo y un poco de hinchazón, en cambio mi mamá, no tuvo absolutamente ninguna molestia. Así que #vacúnate, porque esa es la única manera el que nos volvernos a abrazar.
Más información sobre los efectos secundarios de las vacunas en: houstonmethodist.org